Efecto de un programa de acondicionamiento físico en la alimentación y emociones en un grupo de adultos

Abstract

Actualmente, en el mundo han surgido grandes cambios en el estilo de vida del ser humano por motivo de la pandemia provocada por el virus SARS-CoV-2 ocurrida a finales del año 2019. Esta pandemia ocasionó un confinamiento (o cuarentena) como lineamiento de seguridad sanitaria por parte de la seguridad pública, sectores de salud y otras organizaciones, para disminuir el número de contagios (1). Dos ámbitos a destacar durante la pandemia son la actividad física (AF) y los hábitos de alimentación, en los cuales se han observado modificaciones a partir del inicio de la misma por Covid-19. Objetivo: Diseñar y operar un modelo de atención nutricional y de acondicionamiento físico a cargo de pasantes y estudiantes de la Licenciatura en Nutrición Humana enfocado a la población que asiste a los centros de salud de primer nivel de atención. Metodología: Se brindó atención para el público en general mediante consultas nutricionales vía remota en el consultorio virtual de nutrición del Laboratorio de Nutrición y Actividad Física del Departamento de Atención a la Salud de la UAM Xochimilco. Las sesiones de acondicionamiento físico fueron impartidas de lunes a jueves en dos horarios, 7:00 y 19:00 horas, con una duración de 50 minutos aproximadamente, mediante la plataforma Zoom. Los participantes completaron dos formularios, llamados: “Evaluación De Aptitud Para El Ejercicio” antes de iniciar el entrenamiento y el “Cuestionario de Conductas Alimentarias” antes y después del periodo de entrenamiento para evaluar el impacto del programa de acondicionamiento físico sobre las conductas alimentarias. Con el programa STATA se realizó un análisis factorial con las respuestas al cuestionario de conductas alimentarias. En el análisis se ubicaron 7 factores en total Resultados: Al inicio del programa la media de edad fue de 33.54 años. En el peso corporal la media fue de 78.02 kg. Y en el caso del IMC la media fue de 30.32 kg/m². Se observaron disminuciones en la media de los factores desinhibición alimentaria, emoción y atracón, mientras que la media del factor motivación aumentó. Conclusión: La participación en el programa de acondicionamiento físico se asoció con la disminución de conductas alimentarias de riesgo como atracones, desinhibición alimentaria y alimentación emocional. Se observó relación entre el entrenamiento y el estado de ánimo, provocando disminución del estrés, al igual que aumento de la motivación individual para continuar realizando actividad física de manera habitual aún después de concluir el programa impartido.