Programa de Vivienda en Conjunto (INVI): Un Modelo Referencial de Política Pública en Materia de Vivienda para Mitigar la Crisis de Vivienda Causada por la Gentrificación en Coyoacán CDMX

Abstract

La presente investigación se centra en el análisis del programa de vivienda en conjunto del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México (INVI) y su impacto en la alcaldía de Coyoacán, particularmente en el contexto de la gentrificación. A lo largo del documento, se explora cómo este programa busca mitigar la crisis de vivienda y fomentar el arraigo comunitario entre los residentes originarios. La investigación se basa en entrevistas semiestructuradas realizadas a diez beneficiarios del programa, quienes comparten sus experiencias antes y después de recibir una vivienda. Los hallazgos indican que, aunque el programa ha permitido a los beneficiarios obtener una vivienda asequible con tasas de interés del 0%, existen desafíos significativos relacionados con el acceso a servicios básicos y la calidad de vida en general. Muchos beneficiarios expresan satisfacción por haber dejado de pagar alquileres altos, lo que les ha brindado una mayor estabilidad financiera. Sin embargo, a pesar de las ventajas, algunos beneficiarios señalaron que las viviendas no siempre se adaptan a las necesidades de sus familias, lo que limita su funcionalidad. Además, la presencia de nuevos residentes y turistas ha incrementado los precios de bienes y servicios en la zona, afectando la calidad de vida de los habitantes originales. Este fenómeno de gentrificación genera preocupación entre los beneficiarios, quienes sienten que sus comunidades están cambiando de manera que podría no ser sostenible a largo plazo. Se concluye que, aunque el programa de vivienda en conjunto representa un modelo valioso para abordar la crisis de vivienda en Coyoacán, es fundamental realizar mejoras en la calidad de las viviendas y garantizar un acceso adecuado a los servicios públicos. Se recomienda que futuras políticas públicas consideren las necesidades específicas de los beneficiarios y busquen un equilibrio entre el desarrollo urbano y la preservación del tejido social original, asegurando así que los residentes puedan permanecer en sus comunidades sin ser desplazados.