Construcción de la memoria colectiva en un proyecto de intervención sobre discapacidad

Abstract

Idónea Comunicación de Resultados. ¿Alguien tiene idea clara de lo que estas tres palabras juntas significan? Si uno acude al diccionario, la palabra idóneo remite a dos acepciones. En la primera es entendida como sinónimo de apto o apropiado. Aquí la pregunta obligada sería: Apto o apropiado ¿para quién o para qué? ¿Acaso para las personas que serán mis amables lectores y jurado en este examen de grado y sobre los cuales recae el peso de evaluar este ejercicio? O tal vez ¿Para las personas que fueron cómplices y sin las cuales, habría sido imposible construir buena parte de este trabajo a partir de sus voces y miradas? Como sea, dicen que no hay peor juez que uno mismo. Y esto nos lleva de lleno a revisar la segunda acepción, lo idóneo se vincula con lo ideal y competente. ¡Extraños términos los que se usan dentro de esta Casa de Estudios! Por mi parte, debo decir que este ejercicio de comunicación de resultados dista mucho del ideal que rondó por meses en mi cabeza, ya que este documento se debate entre dos tiempos con lógicas totalmente diferentes. A este producto le hizo falta tiempo, tiempo para poder asimilar, procesar y organizar lo vivido, lo pensado y lo sentido con respecto a este ejercicio que no se clausura con la entrega de este documento. Mientras más se acerca uno al final, más se queda con la sensación de que aún hay cosas por revisar y profundizar, pero los tiempos institucionales no esperan. Así que me avocaré en la medida de lo posible a dar una idea más clara al lector sobre lo que encontrará dentro del trabajo. Esta es una investigación enmarcada en indagar la complejidad de los procesos de constitución de la subjetividad y su relación con lo que llamamos la memoria colectiva del Centro de Atención Infantil Piña Palmera A.C. El trabajo da cuenta de una serie de reflexiones en torno a lo que fue el ejercicio de construir la memoria colectiva de esta organización civil que tiene una trayectoria de casi treinta años de intervenir en un tema como la discapacidad en la región de la Costa en el estado de Oaxaca. Piña Palmera –como también se le conoce-, fue fundada por Frank Douglas en 1984 como una casa-albergue para niños con discapacidad o abandonados y tras la muerte de su fundador dos años después, la labor fue continuada por Anna Johansson, de forma que en 1989 se constituyó legalmente como el Centro de Atención Infantil Piña Palmera A.C., de ese tiempo a la fecha ha tenido importantes cambios. Y aunque su nombre de registro oficial pareciera centrar su esfuerzo en la infancia, Piña trabaja con gente de todas las edades y discapacidades. Desde su fundación, se calcula que cerca de cinco mil personas han participado en los diferentes programas de la organización. Actualmente mantiene un promedio de participación anual en ellos de trescientas personas con discapacidad.