Cambios en los hábitos alimentarios en adultos mayores de 60 años durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19.

Abstract

Objetivos: Identificar cambios en los hábitos alimentarios en un grupo de mujeres adultas mayores de 60 años durante el período de confinamiento, por la pandemia de COVID-19; así como conocer los patrones dietéticos, de consumo de alimentos y de actividad física. Métodos: Se realizó un estudio de cohorte transversal en mujeres que asistían a un centro deportivo y que mantenían un estilo de vida activo. A cada una de las participantes, se les aplicó de forma presencial un cuestionario construido con 25 reactivos que abordan aspectos nutricionales, de actividad física y de síntomas depresivos. Resultados: Se evaluaron 142 mujeres, con una edad promedio de 69.7±7. El mayor porcentaje (n=46, 32.3%) estaban casadas, 29.5% eran solteras, 21.8% viudas, 12.6% divorciadas y 3.5% en unión libre. Casi la tercera parte de las participantes (n=41, 28.8%) tenía estudios universitarios terminados. Se encontró que 60 mujeres (42.2%) tenían hipertensión arterial y 18 (12.6%) padecían diabetes mellitus tipo 2. El valor promedio de su índice de masa corporal (IMC) fue de 26.8±5.2. De acuerdo con la OMS; 27.1% estaba normal, 46.4% tenía sobrepeso, 25% obesidad y solamente 1.4% bajo peso. Respecto a la evaluación nutricional; 79.4% estaban bien nutridas, 19.8% tenían riesgo de desnutrición y 0.07% tenía desnutrición. Cuando se les preguntó si comer entre comidas cambió durante el confinamiento 48.1% afirmó que fue similar y 28.1% refirió que aumentó levemente. A la pregunta ¿Su consumo de comida chatarra/comida rápida/ alimentos fritos cambió? 45.1% aseveró que fue similar y el 22.2% manifestó que aumentó levemente. A la pregunta ¿Su actividad física aeróbica (caminar, correr, subir escaleras etc.) cambió?, 24.4% expresó que fue disminuyó y 22.2% mencionó que fue similar. Cuando se les preguntó si cambió la cantidad de tiempo que permanece sentado y frente a la pantalla (TV, PC, Laptop, otros), 36.3% refirió que aumentó levemente, 26.5% dijo que aumentó mucho y 23.4% señaló que fue similar. Al cuestionar si sus niveles de estrés y ansiedad cambiaron: 31.6% manifestó que fue similar, 27.9% declaró que aumentó mucho y 25.7% expresó que aumento levemente. Conclusión: El consumo de comida chatarra / alimentos fritos que se vio aumentado en más del 20% de las participantes. Respecto a la actividad física; la cantidad de tiempo que permanecieron sentadas frente a pantallas, más de la tercera parte refirió que aumentó.