Identificación Molecular de Bifidobacterias en intestino de Ratas Tratadas con Dietilnitrosamina

Abstract

En 2010 en México fallecieron por algún tipo de cáncer 74,685 personas de las cuales el cáncer de hígado fue responsable de 5,393 muertes y el cáncer colon-rectal de 4,056 casos, encontrándose dentro de las diez causas de muertes por cáncer (Aldaco, et al., 2012). El carcinoma hepatocelular es el tumor más frecuente en el hígado, la quinta causa de muerte en el mundo y la tercera por algún tipo de cáncer, encontrándose en un 20 % en hígado no cirrótico (Aguilar, et al., 2015). El consumo de carnes asadas o fritas, tabaco, alcohol y algunos productos farmacéuticos (Arboatti, et al., 2018) contienen compuestos capaces de metilar el DNA como ejemplo de ellos tenemos a la dietilnitrosamina que al entrar en contacto con las células hepáticas en su forma electrolítica es capaz de dañar el DNA causando la muerte celular, evitando así la regeneración del tejido hepático llevando a la formación de un carcinoma hepatocelular (Jack Wands, 2017). Se ha documentado que algunas cepas de la microbiota del colon pueden generar varias sustancias mutagénicas, carcinógenas o promotores tumorales. Se sabe que las bifidobacterias tienen una actividad antigenotóxica absorbiendo o uniéndose a diversos carcinógenos de origen alimentario; (Burns & Rowland, 2003) manteniendo el equilibrio intestinal y desarrollando efectos antagónicos frente a bacterias perjudiciales para el huésped y ayudando a desarrollar la inmunidad por diversos mecanismos como es el mecanismo de inmunomodulación o síntesis de compuestos antimicrobianos (Sanz, et al., 2006). La mayor parte de la información que se ha obtenido de la microbiota intestinal se ha podido obtener mediante métodos de secuenciación de nucleótidos de la subunidad ribosomal 16S (Bibiloni, et al., 2009) siendo este gen el usado ampliamente para la detección de microorganismos mediante el uso de la técnica de PCR, generando miles de réplicas de un fragmento de DNA a partir de pequeñas cantidades usándose cebadores, nucleótidos y la DNA polimerasa (Garibyan & Avashia, 2013)