¿Existe una discriminación hacia las modificaciones corporales en el área laboral? : la limitación laboral por discriminación a mujeres con modificación corporal

Abstract

La discriminación en México se ha convertido en un fenómeno social importante y en constante repetición a lo largo de todo el país, se piensa que dicha discriminación se reserva únicamente a cuestiones raciales, sin embargo, las causas de discriminación son diversas en todos los ámbitos de la sociedad mexicana. De acuerdo con el CONAPRED, a través de su Encuesta Nacional sobre Discriminación en México 2010, citado en la Gaceta del Senado: “muestra que seis de cada 10 mexicanos consideran que la riqueza es la principal causa de división social. Además, el 40% está convencido de que a la gente se le trata de forma distinta por su color de piel, así mismo, factores como la apariencia física y preferencias sexuales, son de las principales causas de discriminación en la mayoría de los contextos” (2014). Dentro de estas causas aparentes de discriminación, destacamos aquella que tiene que ver con la apariencia física en relación a una apariencia modificada. Las modificaciones corporales representan todas aquellas alteraciones permanentes o parciales que se realizan sobre el cuerpo humano y que además a lo largo de la historia han sido utilizados y realizados con motivos diversos, ya sean simbólicos, estéticos, religiosos, etc. (Barragán, 2011), representan en las personas una marcada diferenciación del resto, en este sentido, las vuelve disímiles a los demás en cuanto a apariencia física nos referimos. En consecuencia, como se menciona anteriormente, la apariencia física de una persona que no se encuentra dentro de los estándares estéticos normalizados en la sociedad, en ocasiones tiene como resultado una exclusión o discriminación hacia la persona que cuente con una apariencia distinta por las alteraciones o modificaciones en su cuerpo. Con el paso de los años y el devenir de las generaciones, muchas de las modificaciones corporales, como el caso de los tatuajes o perforaciones ha dejado de ser algo fuera de lo común, mal visto o como un estereotipo de delincuente, debido a su paulatina, pero constante adopción como símbolo cultural o de moda (Gaceta CCH, 2022). Sin embargo, aunque estas modificaciones en los últimos años se han vuelto cada vez más comunes y por lo tanto más normalizadas entre la comunidad de jóvenes y adultos, no ha asegurado que las personas que posean este tipo de alteraciones físicas cuenten con las mismas oportunidades que el resto de personas que no cuentan con modificaciones corporales.