El servicio profesional docente; política pública empleada, en el 2013, para mejorar la calidad de la educación en México a nivel básico y cómo configuró el sistema de incentivos de los profesores

Abstract

Es innegable ocultar el gran problema de calidad educativa que tiene México. En efecto, cada tres años queda plasmado el problema educativo en los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA), patrocinados por la OCDE, donde en los últimos resultados, del año 2015, México ocupó el lugar 58 de los 72 países participantes. Si bien México tiene un gran problema público en términos educativos el tema no se ha quedado aislado, se ha debatido alrededor de muchos años en cómo mejorar la calidad educativa y que políticas públicas serían las más eficientes para resolver el problema. El debate ha permitido conocer, desde diversas miradas y ramas, cuáles son sus principales problemas, antagonismos y contradicciones del sistema educativo; se ha especificado que el problema educativo es la centralización tanto organizacional como en la toma de decisiones, o se ha manifestado que el principal problema es la falta de infraestructura en las escuelas, o, en varios casos, se ha especificado que el principal problema es el sindicato magisterial en manos del SNTE y la CNTE. Esta investigación analiza las variables que inciden en mayor o menor medida a que el problema de la calidad educativa siga agravándose. Planteé cuatro variables causales que, desde mi punto de vista y bajo trabajo empírico, son las que inciden en que permanezca o empeore el problema de calidad educativa. Una variable que consideré que sigue acrecentando el problema es el control y manejo de ingreso y promoción a la docencia por parte del sindicato magisterial. Abordé el problema con un marco analítico concreto y visto desde la perspectiva del nuevo institucionalismo y el análisis de las políticas públicas. No obstante, cabe resaltar que una de las decisiones en las cuales se planteó resolver gradualmente el problema educativo fue con la ambiciosa reforma educativa implementada por el gobierno de Enrique Peña Nieto en el año 2013. Esta reforma planteaba, principalmente, el servicio profesional docente política pública que generó malestar ya que fue vista como mecanismo de castigo a los docentes y que, por ende, modificó su sistema de incentivos. Dicha política pública es analizada y revisada para formular un criterio de por qué fracasó o tuvo, en parte, cierta mejora a la calidad del sistema educativo.