La cultura como mercancía en la sociedad global

Abstract

El argumento central de mi investigación se sustenta en la idea de que con el auge de la globalización la cultura se convirtió en un producto mercantil que puede ser consumido por cualquier individuo. La cultura cumple un papel de suma importancia en la sociedad, sin embargo, con el paso del tiempo, el consumo y la globalización han generado que está pierda su importancia, pues los individuos han dejado de verla como un referente fijo y sólido, es decir, algo que está intrínseco en cada uno, ahora se ha convertido en un objeto que puede ser consumido, ya sea por moda, por experiencia, valores sociales, éticos o personales. Hoy en día nos encontramos bajo un sistema económico que pone al alcance de los individuos todo tipo de productos, servicios y bienes para el consumo, este representa el hecho de satisfacer necesidades o deseos que las personas generan. El consumo puede ir desde comprar lo más básico para las necesidades, hasta una tendencia de querer adquirir o gastar bienes para comprar cosas que algunas veces no se necesitan. Anteriormente, el consumo tenía como principal objetivo cubrir las necesidades básicas como: comer, vestir, sobrevivir. Actualmente no se piensa en la funcionalidad de lo que se consume, sino que esta tiene como principal objetivo la experiencia y el satisfacer los deseos de los bienes que demandan los individuos. Tal parece que el consumo genera un impacto importante en los seres humanos creando ilusiones de bienestar, satisfacción y felicidad, podría decirse que el consumo se ha convertido en una acción alienada, ya que si esta ilusión desapareciera el ser humano perdería el sentido quizá de producir y consumir. Dentro del consumo encontramos el consumo de cultura, aunque cada sociedad tiene diversas culturas y cada una representa a un cierto tipo de individuos, de alguna manera una sobresale más que otra e incluso muchas veces es impuesta por una clase dominante, es así como se podría generar una “moda” que dé como resultado productos culturales de transcendencia universal, que incluso pueden llegar a convertirse en un estilo de vida.