Impacto en la función sexual masculina posterior a la realización del método de planificación familiar permanente vasectomía sin bisturí en el periodo noviembre 2024-marzo 2025 en el C.S.T-III Dr. José Castro Villagrana

Abstract

La planificación familiar constituye un componente esencial de la salud reproductiva y un derecho fundamental que permite a hombres y mujeres decidir de manera libre, responsable e informada el número de hijos que desean tener y el intervalo entre cada nacimiento. Esta práctica contribuye al bienestar individual, familiar y social, además de favorecer el desarrollo económico de las comunidades. No obstante, la participación masculina en la regulación de la fertilidad ha sido históricamente limitada, restringiéndose a métodos como el condón, el coito interrumpido y la abstinencia periódica, los cuales presentan diversos niveles de eficacia y aceptación. La anticoncepción masculina ha evolucionado desde el siglo XVIII, con el uso del condón como método de barrera, hasta la implementación de la vasectomía a finales del siglo XIX. En la actualidad, la vasectomía sin bisturí representa una alternativa moderna, segura y eficaz. Este procedimiento consiste en la interrupción de los conductos deferentes mediante una pequeña punción en la piel del escroto, sin necesidad de incisiones ni suturas, lo que reduce las molestias, las complicaciones postoperatorias y permite una pronta reincorporación a las actividades cotidianas. Las técnicas más utilizadas incluyen la pinza de disección sin bisturí, la ligadura o cauterización y la interposición fascial, que disminuye la posibilidad de recanalización. Diversas investigaciones han demostrado que la vasectomía sin bisturí presenta una alta eficacia anticonceptiva, con tasas mínimas de embarazo no deseado y escasa incidencia de complicaciones. A pesar de ello, aún persisten mitos y barreras socioculturales que limitan su aceptación, especialmente aquellas relacionadas con la virilidad o la disminución del deseo sexual. Sin embargo, la evidencia científica confirma que el procedimiento no afecta la función eréctil, la eyaculación ni el placer sexual; por el contrario, en muchos casos se observa una mejora en el deseo y la satisfacción, atribuida a la reducción de la ansiedad frente a embarazos no planeados y a una mayor libertad psicológica y de pareja. En el contexto mexicano, instituciones como el C.S.T-III Dr. José Castro Villagrana destacan en la implementación de la vasectomía sin bisturí, ofreciendo consejería integral, atención quirúrgica de calidad y seguimiento postoperatorio. Analizar el impacto de este procedimiento en la vida sexual masculina permite comprender sus beneficios clínicos y psicosociales, así como fortalecer la participación del varón en la planificación familiar y en la promoción de una paternidad responsable.