Comparación en su formulación de geles antibacteriales comerciales y su relevancia en la pandemia por la Covid 19

Abstract

La pandemia que se vive en la actualidad por la enfermedad COVID-19 causada por el virus SARS-CoV-2 ha generado variedad de dudas en la población mundial. Una de las cuestiones que más resalta es, si el uso de desinfectantes para manos (geles, hidro alcohol, sanitizantes comerciales) en verdad nos ayuda a prevenir esta patología. El virus se transmite generalmente de persona a persona a través de pequeñas gotas de saliva, conocidas como gotas de Flügge, que se emiten al hablar, estornudar, toser o respirar. El lavado correcto de manos es la medida de prevención más importante que tiene como finalidad disminuir la transmisión de microorganismos a través de las manos, incorporada en 1947 por Ignaz Semmelweis. Una de las maneras que la población denomina a los geles desinfectantes para manos es “gel antibacterial” teniendo un mal manejo de este término, porque no solo es útil en la eliminación de bacterias sino también en la erradicación de variedad de microorganismos, incluidos los virus. Como resultado, este tipo de productos han proliferado en el mercado. En su uso, las agencias sanitarias han señalado defectos de calidad en algunos geles antibacteriales por la ineficacia del producto, ya que no contienen las concentraciones necesarias para poder garantizar de que su efecto antibacteriano o virucida. El empleo de alcoholes para dicho fin se justifica por su capacidad para desnaturalizar proteínas de los microorganismos, sin embargo, concentraciones mayores de alcohol en el producto lo hacen menos potente debido al hecho de que las proteínas no son desnaturalizadas fácilmente en ausencia de agua. A medida que la epidemia evoluciona, surgen acontecimientos y criterios que llevan a toda la comunidad científica a generar información día a día con el fin de que esta nos sea útil para combatir esta enfermedad. Como principal recomendación se enfatiza la limpieza y desinfección de manos como también de superficies en general para evitar la transmisión de enfermedades por agentes microbianos (SARS-CoV-2).