Apuntes para un mejor funcionamiento de la oficina de publicaciones del Gobierno del Estado de Tabasco

Abstract

En un primer momento, el título tentativo de esta idónea comunicación de resultados (iceerre) fue el siguiente: Reedición del libro El zapateo tabasqueño, de Jorge Priego Martínez, texto de divulgación publicado en 1989 y proyectado para 2017 como libro de arte. Así presenté el anteproyecto. Y así fue aceptado. El propósito era publicar un libro artístico, es decir, un producto editorial de gran calidad formal, diseñado y producido con un marcado interés por la belleza material. Durante los dos primeros trimestres, el sintagma libro artístico fue eje de mi exposición (alguna vez exageré al declarar que mi intención era publicar un libro faraónico), y tres autores resultaron definitorios en esta etapa: Antonio Bonet Correa, Don Mckenzie y Robert Darnton. Con ellos aprendí corroboré, mejor dicho que la forma y el fondo están estrechamente vinculados: lo que uno percibe con los cinco sentidos– halla consonancia con lo que uno interpreta con el cerebro y el corazón–. He aquí una verdad, pertinente siempre. Digo que «corroboré» porque ya lo sabía, aunque de manera empírica (además, lo que uno dé por hecho siempre debe ser contrastado con la opinión de terceros). En principio, pues, mi iceerre era un proyecto de producción profesional.